Desde mi chinchorro…
MI VIDA EN VENEZUELA
Que linda es mi Venezuela, pero detrás de tanta belleza se ocultan tantas cosas
extrañas, (al estilo de los hermanos Rosarios en New Yord). Mi vida en
Venezuela no asido fácil, dice Esteban de Jesús desde su sillón, me levanto a
las 4 de la mañana corriendo al baño, abro la regadera ¡que sorpresa! Sin agua
nuevamente. ¡Qué suerte la mía hay crema dental Colombiana! Me cepillo y me
visto con rapidez, corro a la esquina para alcanzar la única buseta que trabaja
ya que la mayoría no funciona por falta de repuestos y caucho, ¡oh no! Que
vendita suerte la mía, exclama Esteban de Jesús, nos atracaron nuevamente, pero
no todo es malo “aumentan el salario mínimo y el Cesta Ticke” que bien ¡qué
alegría! Ahora si voy a poder comprar mi cesta básica, voy al mercado, ¡DIOS!
Que sorpresa aumentaron el precio de los huevos, del jamón y las caraotas,
harina no hay, pasta no hay, arroz no
hay, leche no hay, pollo no hay. Regreso a mi casa ¡que sorpresa! Mi vecino tiene
todos los productos que busco en una mesita al frente de su casa, Harina,
arroz, pasta, mayonesa, salsa de tomate, desodorante, jabón de baño, crema
dental con promoción cepillo incluido y todo importado. Y pienso, ¿en oferta?
pues es mi vecino. (Ya todo sabemos la respuesta). Al cabo de unos días la
esposa de Esteban de Jesús se enferma de la tensión arterial, unida a la mala
alimentación por las carencias de alimento y la falta de medicamento fallece.
Sigue Esteban de Jesús solo sin
compañera pero con la carga de dos hijos.
Pero no todo es malo repite Esteban de Jesús desde su sillón,
mi hijo se gradúo de ingeniero en petróleo y mi hija de odontóloga ¡qué
alegría! Dos profesionales dispuestos a dar lo mejor por nuestro país, quien
los vio nacer, crecer y formarse para ser parte del progreso y el
crecimiento de mi Venezuela, al cabo de un tiempo y luego de intentar conseguir
trabajo ambos buscaron nuevos horizontes en el exterior donde los acogen y les dieron oportunidades
de desarrollarse y ejercer sus profesiones, el ingeniero en México, la odontóloga
en Chile y Esteban de Jesús en Venezuela. Con la fe y esperanza, que en algún
momento todo va a cambiar, que nuestros hijos van a regresar y nuestra bella
Venezuela va a florecer siendo ejemplo de constancia, dedicación y progreso,
así como Esteban de Jesús hay millones de Venezolanos que añoramos una Venezuela
de Progreso, de oportunidades
donde podamos convivir y que el estudio y el trabajo sea la prioridad
para todos, es necesario que conservemos y fortalezcamos el amor a Dios, por el prójimo, por lo nuestro, y que al
estilo de Renny Otolina, “nos mantengamos en guerra contra el atraso, contra la
ignorancia y contra la flojera.” Que repudiemos el bachaqueo, el tráfico de
influencia, la corrupción, la delincuencia, la especulación, la apatía, que no
seamos cómplices de estos flagelos y que
tengamos presente. Cito a (Renny Otolina) “que solo aprendiendo y trabajando
podremos salir de abajo porque (…) no conozco otra manera”
Licdo. Whistong D.
Zavala D.
Comunicador Social
Publicado en el Diario el Regional del Zulia (27/08/2016)